martes, 28 de agosto de 2012

Obesidad y cáncer.


                                              


La palabra cáncer no por temida debe ser evitada. Mientras más conocido es un enemigo más fácil será su derrota o la prevención de sus agresiones.
Así pues, el cáncer se define como un proceso que se inicia en las células del cuerpo humano.
En situaciones de salud y normalidad, la aparición de nuevas células son para reemplazar a las ya envejecidas y en proceso de eliminación.
Sin embargo, en ocasiones no sucede de esta manera pues pudieran crecer innecesariamente nuevas células y por otra parte, no dejar de existir las ya caducas.
Esta innecesaria acumulación celular puede formar una estructura conocida con el nombre de tumor. Ellos pueden ser benignos o malignos. Los primeros no guardan absolutamente ninguna relación con el cáncer.
Los segundos sí, pudiendo crecer de manera invasiva hacia los tejidos más próximos. También pueden desprender células capaces de propagarse a otras partes del cuerpo.
LA CIENCIA AVANZA
Han sido realizados grandes estudios epidemiológicos donde todos coinciden en un mayor riesgo de padecer de determinados tipos de cánceres en personas con excesivo peso corporal. En el plano teórico se han planteado diversas hipótesis tratando de explicar el hecho.
La obesidad, se plantea, es un factor de riesgo en el pronóstico de determinados tipos de cánceres repercutiendo en la mortalidad por esta enfermedad hasta en un 20% en determinadas poblaciones.
De ahí se deduce que si la consideramos como un factor cancerígeno más, tratamiento y prevención del excesivo peso corporal deben considerarse entre las medidas a adoptar en la lucha contra el cáncer.



NUESTROS DATOS
En Cuba el cáncer ocupa la segunda causa de muerte en el país, pero ya hay provincias donde esta enfermedad es la primera causa de muerte.
Por otro lado, también existe alrededor de un 42 por ciento de personas con sobrepeso y obesidad. La educación de nuestra población en los aspectos nutricionales y de beneficiosos estilos de vida, o sea, cambios de costumbres para bien de nuestra salud, prevendrá un importante factor de riesgo para este padecimiento.
ELOCUENTES EVIDENCIAS
En España fue realizada una investigación científica en el Instituto Catalán de Oncología y publicada este año en la revista médica The American Journal of Clinical Nutrition. En ella se demuestra como el consumo cotidiano y abundante de vegetales y frutas disminuye en un 30 por ciento la posibilidad de eventos fatales como consecuencia de enfermedades como el cáncer.
Las conclusiones de la investigación establecieron una directa relación entre un mayor consumo de vegetales y frutas y una menor mortalidad pues hay un menor riesgo de padecer cáncer y otras enfermedades.
Pudo demostrarse como al consumir una ración diaria de frutas y más de un vegetal diariamente se redujo la mortalidad en un 30%. De manera adicional fue planteado que las hortalizas que aportan mayores beneficios son aquellas con semillas como el pimiento, el tomate o el pepino.
Con todas estas evidencias es muy conveniente, al igual que se ha hecho con el tabaco, inculcar aun más en la población el concepto de la necesidad de basar la alimentación en nutrientes saludables bajos en calorías, abandonar el sedentarismo y, de esta manera, evitar la obesidad, factor de riesgo de cáncer.


(Fuente;Por: Prof. Dr. Alberto Quirantes Hernández)

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.